Biological Nurturing: Volver al Instinto en la Lactancia Materna
- Yennifer Marquez
- 4 ago
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Durante décadas, la promoción de la lactancia materna se ha visto atravesada por un enfoque técnico y prescriptivo. Se han estandarizado posiciones, tiempos de succión, agarres "correctos", rutinas de alimentación y hasta formas de sostener al bebé. Sin embargo, esta visión, aunque bien intencionada, ha contribuido en muchos casos a una experiencia frustrante para madres y bebés, desconectándolos del instinto.
Frente a este paradigma, emerge con fuerza una propuesta revolucionaria y profundamente humana: el Biological Nurturing, desarrollado por la matrona británica Suzanne Colson.
¿Qué es el Biological Nurturing?
El Biological Nurturing (BN) o lactancia instintiva es un enfoque basado en el respeto por los comportamientos neurobiológicos que madres y bebés expresan naturalmente después del nacimiento. Lejos de imponer técnicas, el BN se basa en crear un entorno propicio para que el instinto se despliegue.
Colson, en su investigación doctoral, observó que cuando la madre se encuentra en una posición semireclinada, relajada, con su recién nacido de frente sobre su cuerpo, se activan una serie de reflejos innatos tanto en ella como en su bebé: reflejos de búsqueda, succión, gateo, presión palmar, entre otros. En lugar de "dirigir" la toma, la madre sostiene y apoya un espacio amoroso donde el bebé puede autorregularse, encontrar el pecho fácilmente con ayuda de la madre y amamantarse de manera cómoda para ambos.
En Chile, este enfoque ha comenzado a expandirse gracias al trabajo comprometido de Pamela Rubio Werner, matrona, docente de Escuela Renacer y única profesional chilena certificada oficialmente en Biological Nurturing por Suzanne Colson.
Pamela ha dedicado años de estudio, práctica clínica y docencia a rescatar los aspectos instintivos de la lactancia y devolver confianza a las madres y sus cuerpos. Su enfoque es profundamente respetuoso, centrado en el vínculo y la fisiología del bebé como mamífero.

Si quieres escuchar su visión y experiencia de primera mano, te invitamos a escuchar el episodio de nuestro podcast dedicado a este tema https://open.spotify.com/episode/6nXsJmmj7AgSJ9zvZOYsdJ?si=263df7fd3d864a67
Además, queremos contarte que estamos trabajando para ofrecer, próximamente, la primera formación especializada en Biological Nurturing en Latinoamérica, de la mano de Pamela y con el respaldo de Escuela Renacer. Pronto compartiremos todos los detalles.
¿Por qué cuestionar el enfoque técnico?
Aunque las guías técnicas sobre lactancia han sido útiles en muchos contextos, también han producido efectos no deseados: madres tensionadas tratando de hacer "todo bien", profesionales corrigiendo posturas sin considerar el estado emocional de la díada, bebés desconectados de sus reflejos por una intervención excesiva.
La lactancia no es una técnica. Es un vínculo neurobiológico y afectivo, profundamente mamífero. Al insistir en que las madres aprendan “cómo hacerlo”, muchas veces se les transmite (sin querer) el mensaje de que no saben, que sus cuerpos son torpes o que necesitan instrucciones externas para alimentar a su cría.
Como señala Colson (2010): “El objetivo no es enseñar a la madre a amamantar, sino permitirle crear las condiciones para que el instinto haga su trabajo.”
El bebé como mamífero
El enfoque del BN nos recuerda algo esencial: el bebé humano es un mamífero, y como tal, viene equipado con capacidades innatas para iniciar la lactancia. No necesita ser "entrenado". Necesita tiempo, contacto, calma y un entorno que no lo frustre o apure.
En palabras de Suzanne Colson:
"La lactancia no comienza con una técnica, comienza con el contacto. El contacto con la madre es el útero externo."
(Colson, S. Biological Nurturing®)

La importancia de la salud mental materna
A este enfoque fisiológico y vincular es necesario sumar otra capa fundamental: la salud mental de la madre.
La psiquiatra perinatal Ibone Olza ha aportado ampliamente a la comprensión de que la lactancia no ocurre en el vacío, sino en un contexto emocional, social y psicológico que influye profundamente en su curso. Lactar no solo es un acto biológico: es también un acto psíquico, afectivo y espiritual.
Las madres necesitan sentirse seguras, sostenidas, escuchadas. Las dificultades en la lactancia muchas veces no se deben a un problema físico o técnico, sino a factores como el agotamiento, la ansiedad, la presión social o el miedo a “no estar haciéndolo bien”.
Desde esta mirada, el acompañamiento en lactancia debe integrar también una perspectiva de salud mental perinatal: reconocer el impacto del parto, la vulnerabilidad del puerperio, la ambivalencia emocional, el duelo por las expectativas no cumplidas, el deseo de vincularse con libertad y placer.
El Biological Nurturing, al facilitar el contacto, el descanso, la conexión con el cuerpo y el respeto por los tiempos de la díada, es una herramienta que también favorece el bienestar emocional. Es una forma de cuidar la lactancia desde el cuidado de la madre.
Crear condiciones, no controlar procesos
El desafío que propone el Biological Nurturing a las y los profesionales de salud es profundo: cambiar el rol de expertos por el de acompañantes. Pasar de corregir a observar. De intervenir a confiar. Reconocer que, cuando se les da la oportunidad, la mayoría de las madres saben amamantar y los bebés saben acoplarse.
En el contexto actual, donde la medicalización del nacimiento y la lactancia se ha naturalizado como norma, este enfoque emerge como una propuesta contrahegemónica que cuestiona las prácticas biomédicas. Este paradigma no solo devuelve centralidad al cuerpo materno, sino que lo reconoce como un territorio de saberes fisiológicos, emocionales y vinculares, históricamente desplazados por la técnica.
En tiempos donde el exceso de intervención ha invisibilizado la confianza en la díada madre-bebé, se vuelve urgente recuperar una mirada que valore el instinto y el vínculo primario como base de toda experiencia de cuidado. Porque la primera forma de criar no nace de una técnica, sino de un gesto profundamente humano: ese abrazo inicial que no solo alimenta, sino que reafirma que el cuerpo sabe, que el vínculo importa y que, a veces, lo más revolucionario es simplemente confiar.
Referencias
Colson, S. (2019). Biological Nurturing® – Instinctual Breastfeeding (2.ª ed.). Pinter & Martin. Recuperado de https://books.google.com/books/about/Biological_Nurturing.html?id=SY68swEACAAJ ouci.dntb.gov.ua
Colson, S. D., Meek, J. H., & Hawdon, J. M. (2008). Optimal positions for the release of primitive neonatal reflexes stimulating breastfeeding. Early Human Development, 84(7), 441–449. https://doi.org/10.1016/j.earlhumdev.2007.12.003 pubmed.ncbi.nlm.nih.govrepository.canterbury.ac.uk
Biological Nurturing®. (s. f.). Recuperado de https://www.biologicalnurturing.com biologicalnurturing.com
Olza, I. (s. f.). Recuperado de https://www.iboneolza.org (sitio web oficial de Ibone Olza)
Wang, Z., Liu, Q., Min, L., & Mao, X. (2021). The effectiveness of the laid‑back position on lactation‑related nipple problems and comfort: a meta‑analysis. BMC Pregnancy and Childbirth, 21(1), 248. https://doi.org/10.1186/s12884-021-03714-8




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